Lucas Moura, jugador del Tottenham Hotspur, lo tiene claro: «Dios es maravilloso». Y además no tiene ningún reparo en decirlo abiertamente.
Según leemos en Sporthiva, él dice que sus habilidades en el fútbol son «un talento que Dios me dio. No solo creo que es un gran regalo de Dios y creo que si él me dio este talento, este regalo, es porque quiere usarme en este entorno, en medio del fútbol, para cumplir algún propósito suyo».
«Sin duda, todo jugador quiere ser recordado por todo lo que hizo en el campo, por las actuaciones, por los títulos, también quiero esto Sin embargo, también quiero ser recordado principalmente por mi ejemplo como persona, quiero ser recordado como un hombre de Dios, una persona con buena actitud y para mí, creo que eso es lo que más importa, el carácter, el buen ejemplo de una persona que ayuda a la gente a encontrar a Dios. Quiero ser recordado por eso».
Explica que un momento duro de su vida, comenzó a leer la Biblia y se enamoró de Jesús y del Evangelio.
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