Termina el tiempo de Cuaresma, la Semana Santa, y termina con el gran acontecimiento Pascual: la Resurrección del Señor. Jesús vence a la muerte. La vida pudo con el trágico suceso de la tarde-noche del Viernes Santo.
El hecho de la Resurrección de Jesús abre un nuevo panorama a los amigos del Maestro. Después de la perplejidad, las prisas o el nerviosismo en el Cenáculo, se pasa a intentar asimilar el acontecimiento con una pregunta: ¿Ahora, Qué?