Cuando adquirimos un compromiso, nuestra lucha por llevarlo a cabo debe ser incesante. Y si tu compromiso es con Dios y los hermanos con más razón utilizamos los medios a nuestro alcance.
Éste es el caso que leemos en Aciprensa, el del Obispo de Gizo en las islas Salomón, al que llaman el «el Obispo Volador». Este Obispo salesiano visita a las poblaciones locales necesitadas de su diócesis gracias a una avioneta en la que lleva comida y medicina.
La diócesis de Gizo está formada por unas 40 islas con una población total de 120 mil habitantes de los cuales el 15% son católicos, es decir uno 15 mil.
Gracias al apoyo económico de la Conferencia Episcopal Italiana (CEI) pudo hacer un curso de piloto y la diócesis recibió una avioneta ultraligera.
Con la avioneta, que él mismo pilota desde 2011, visita hospitales, escuelas y comunidades a las que entrega medicinas y productos de primera necesidad. Además puede suplir la soledad que viven sus feligreses al estar esparcidos por numerosa islas.
Sobre este testimonio puedes leer más en este enlace de Aciprensa