En el tiempo que transcurre entre el fallecimiento de un Papa y la elección del siguiente algunos mencionan a candidatos progresistas o conservadores. El Papa es el sucesor de Cristo, y su mensaje es transmitir algo tan progresista, y a la vez tan conservador, como el Evangelio.
¿Puede un Papa ser progresista o conservador? ¿es posible que un Papa cambie la moral, por ejemplo, en relación con la gravedad de los pecados de aborto o anticoncepción? El aborto, al fin y al cabo, siempre hace relación al quinto mandamiento del Decálogo, no matarás. Por tanto un aborto provocado está mal siempre, en todos los casos. Igualmente la contracepción es contraria a la finalidad prevista por Dios para el acto sexual: la transmisión de la vida a través de un acto de amor
¿Y respecto a las llamadas relaciones prematrimoniales o el divorcio? El Evangelio de san Marcos recoge las palabras de Jesús: “abandonará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer, y serán los dos una sola carne. Lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre”. Es decir que solamente el matrimonio es un verdadero amor, y requiere un compromiso ante Dios, donde además se recibe la gracia del sacramento. De este modo la unión carnal, fuera del matrimonio, es ofensa a Dios, antes, ahora y en el futuro. Al mismo tiempo que, dentro del matrimonio, es camino de santidad.
¿Y los actos homosexuales? Tanto en el Génesis como en las cartas de san Pablo son considerados gravemente inmorales. Esto no quiere decir que no puedan ser cristianos católicos los homosexuales, sino que para vivir bien su fe, deben evitar estos actos.
Juan Pablo II, Benedicto XVI, Francisco, y los Papas anteriores y sucesivos nos han transmitido y transmitirán, Dios mediante, el mensaje de Jesús de Nazaret. Que se definió como el Camino, la Verdad y la Vida. Y que los cristianos lo adoramos como perfecto Dios y perfecto Hombre.
Rafael de Mosteyrín Gordillo