Encadenada, golpeada y con signos de violencia sexual fue encontrada una religiosa, de 30 años, cerca del monasterio Santa Teresita donde residía, en la zona rural de Medellín (Colombia).
Se trata de una congregación de clausura dedicada a la vida contemplativa. A la hora de la cena, como no aparecía, las hermanas salieron a buscarla y encontraron un espectáculo dantesco.
La monja fue trasladada al hospital Pablo Tobón Uribe, donde se encuentra en cuidados intensivos por las graves lesiones sufridas y está recibiendo atención psicológica.
La Conferencia de Religiosos de Colombia ha repudiado los hechos “abominables desde todo punto de vista” que vulneran la dignidad de las mujeres y, más todavía, contra una religiosa.
Fuente: Vida Nueva