Francisco Valverde es uno de tantos voluntarios de la JMJ en Lisboa. Pertenece a la diócesis de Córdoba (España). Ha tenido la gran suerte de confesar con el Papa Francisco y siente «verdaderamente que ha vuelto a nacer; es decir, poner mi vida delante de quien es el representante de Cristo en la tierra, recibir su perdón, consejo y bendición es morir y volver a nacer».
Este joven, alegre y comprometido, mantiene que de vuelta trae una ilusión y una alegría que no se puede explicar: «la vida para mi comienza de nuevo».
Su trabajo en Lisboa lo ha llenado de razones para seguir a Cristo con fuerza y decisión.
Fuente: Diócesis de Córdoba