Jane es una mujer madura y bienintencionada. Casada con un vicario y madre de una hija adolescente, está lejos de ser la perfecta ama de casa. Su aspecto torpe y descuidado contrasta con el de Prudence, una atractiva joven de 29 años, elegante y solitaria, con un largo historial amoroso en el que no faltan suspiros y lágrimas. A pesar de las diferencias, a ambas les une una amistad que se inició en Oxford cuando Jane era profesora de literatura inglesa y Prudence era su alumna. Ambas buscan, a su manera, un hombre apropiado para Prudence. Una deliciosa comedia sobre la sociedad inglesa de clase media.
Barbara Pym está considerada como la nueva Jane Austen por su inteligencia, su capacidad para describir el lado más insólito de personajes en apariencia anodinos, su talento para extraer de situaciones banales una lección de vida dirigida al lector, y todo eso sin caer nunca en la moralina fácil. Sus novelas son de las que se leen sonriendo y subrayando frases que son un destilado de la mejor prosa británica.
La autora de la obra es Barbara Pym (1913-1980), novelista inglesa, conocida sobre todo por sus dos novelas Mujeres excelentes (1952) y Jane y Prudence (1953), muy ricas en matices psicológicos y con gran sentido del humor, que tuvieron gran éxito. Como afirma la crítica, “son magníficos retratos sobre la cotidiana realidad de unos personajes de vidas grises externamente”.
Aunque durante unos años la autora cayó en el olvido, en 1977 recuperó el apoyo de la crítica cuando Philip Larkin habló de ella como la nueva Jane Austen, porque efectivamente su estilo se asocia con la novela de costumbres y la descripción de la vida ordinaria y los profundos sentimientos de los personajes. Así pues, en la obra destaca el magnífico estudio psicológico de los personajes (especialmente, los femeninos), a través del monólogo interior y del estilo indirecto libre, donde la autora con gran maestría presenta toda una gama de pensamientos, sentimientos, afectos y deseos.
Reseña de Ana María Díaz Barranco para Club del lector