Ante los acontecimientos ocurridos en la tarde de hoy, 25 de enero, en la parroquia Nuestra Señora de La Palma y en la capilla de San Isidro de Algeciras, en el que una persona ha resultado muerta y varias heridas, queremos, en primer lugar, trasladar nuestra cercanía y afecto y el consuelo de la fe a los familiares de las víctimas, a la diócesis de Cádiz y a la sociedad del Campo de Gibraltar.
Expresamos también nuestra más firme condena de toda forma de violencia, que no puede tener lugar en la sociedad en la que vivimos.
Como creyentes, pedimos al Dios de la misericordia y de la paz que llene de esperanza los corazones de las víctimas y sane los heridos, acompañe a la Iglesia y a la sociedad en la búsqueda de la paz y convierta el corazón de las personas violentas.
Conmocionado por el ataque armado sucedido en dos parroquias de Algeciras, que ha causado la muerte del sacristán de una de ellas y ha herido de gravedad al párroco de otra así como almenos a dos personas más. Rezo por las víctimas de esta atrocidad y por sus familiares.
— Card. Juan José Omella (@OmellaCardenal) January 25, 2023
Con dolor he recibido la noticia de los acontecimientos en Algeciras. En estos momentos tristes de sufrimiento, nos unimos al dolor de la familia de las víctimas y de la diócesis gaditana y pedimos al Dios de la vida y de la paz, por la pronta recuperación de los heridos.
— Mons. Francisco César García Magán (@MonsGarciaMagan) January 25, 2023
Fuente: Conferencia Episcopal Española