Ayer se celebraron los comicios electorales en toda la geografía de la piel de toro, en las Islas Canarias y Baleares, y también en Ceuta y Melilla. Los resultados son ya conocidos por todos y los problemas de estabilidad o no son los que hoy ocupan las portadas de los periódicos en la que aparecen la foto de los lideres políticos todos felicitándose por los estupendos resultados electorales cosechados ayer.
Pues aunque seamos los únicos, nosotros podemos decir que hemos perdido y no nos da miedo reconocerlo. Las urnas han castigado a aquellos que pensamos que hay valores irrenunciables como la vida, la libertad para educar a los hijos, la igualdad de oportunidades para todos, la familia como bien de la sociedad, la asignatura de religión como bien preciado para que el hombre pueda conocer la Verdad, favorecer a los más desprotegidos, etc.
Muchos que ayer fueron a las urnas se olvidaron que mientras depositaban su voto había un Padre, con corazón de madre, que los miraba con cariño, con una sonrisa o con una lágrima y que ha venido a trasmitir esos valores irrenunciables y a defenderlos con su Vida pero es que Vino a los suyos pero los suyos no le recibieron.
Pero no pasa nada, porque como dicen los políticos, sólo hemos tenido un problema de comunicación, no hemos sabido comunicar que Dios ama a cada persona y que es capaz de seguir dando la vida por cada uno. Y eso, con tu ayuda, estamos dispuestos a resolverlo: Contamos Contigo.