Seguro que sabes lo que es irse de Erasmus, todos tenemos experiencias cercanas en familiares o amigos, también es posible que tú mismo lo hayas experimentado en primera persona. Es una etapa más dentro de la vida del estudiante. Una experiencia de ámbito universitario que facilita la movilidad académica de los estudiantes en el territorio europeo.
Son tantas y tantas las ventajas que supone la experiencia Erasmus que es una elección casi asegurada para cualquier estudiante. Aprobar esa asignatura que tantos dolores de cabeza nos produce en nuestra universidad de origen, salir de fiesta un día sí y al otro también, tener relaciones ocasionales con un chico o una chica de forma desmedida, en definitiva, vivir una experiencia alocada. Estas son las razones que algunos alegan, pero la experiencia Erasmus, es mucho más que todo eso…
Jorge, un buen amigo y compañero de Derecho, lleva tres meses viviendo su experiencia Erasmus en Roma. Eligió ese destino por ser la cuna de la Iglesia Católica, y según me cuenta es una experiencia que le está permitiendo “conocer a muchísima gente, con diferentes maneras de pensar, gente de todo tipo”, que le ha abierto la mente y le ha llevado a evolucionar como persona.
Me escribe un WhatsApp cada madrugada de miércoles, mientras espera en la Plaza de San Pedro la Audiencia que ofrece el Papa Francisco, o cada domingo para contarme lo vivido en el Ángelus. Jorge me asegura que “es todo un privilegio estar tan cerca del Santo Padre y una experiencia que le está llenando”.
Ayer le preguntaba que si en Roma había aprendido algo más que el ordenamiento jurídico italiano, y su respuesta fue muy significativa: “he aprendido que existen muchos jóvenes con un gran compromiso social y con una gran preparación, capaces de hacer grandes cosas y que rompen con los tópicos del Erasmus”.
Estos tres meses de intenso estudio y de vivencias personales han hecho ver a Jorge que al contrario de lo que piensa mucha gente, somos muchos los jóvenes que tenemos ambición por hacer grandes cosas.