Se acerca la fiesta de Pentecostes, gran fiesta de la Iglesia y gran fiesta para nuestras almas porque el Gran Desconocido es el Amor y descubrir un Amor no tiene precio. El Espíritu Santo con su fuerza arrolladora nos va ayudar a Amar: a todos y a cada uno. Por consiguiente vivir con el Espíritu Santo es vivir con el Amor y para el Amor.