El Papa Francisco ha dicho recientemente en Singapur que todas las religiones son un camino hacia Dios. Así es, y se cumple en las religiones propiamente dichas y en la medida en que respeten la dignidad humana y no se opongan a la fe cristiana. No se dice esto, por tanto, en referencia a las deformaciones de la religión como la violencia o el terrorismo.
Por otra parte, el Papa tampoco afirmó que las religiones fueran entre sí equivalentes, o que tuvieran el mismo valor en la perspectiva cristiana. De hecho, la doctrina católica reconoce que cuanto de bueno y verdadero se encuentra en las otras religiones viene de Dios, es reflejo de su verdad, puede preparar para la acogida del Evangelio y conducir hacia la unidad de la humanidad en la Iglesia de Cristo, según nos enseña el Compendio de la Iglesia Católica, en el número 170.
Rafael de Mosteyrín Gordillo