El pasado 29 de junio, Alejandro, un niño de 10 años, hizo su Primera Comunión en la parroquia de Nuestra Señora de la Asunción de Arroyo de la Luz (Cáceres).
No pudo hacerla con sus compañeros porque tuvieron que operarle del corazón y se encontraba convaleciente. Pero, cuando por fin ha podido hacerla, no ha estado solo ya que sus amigos volvieron a vestirse de Comunión para acompañarle mientras recibía por fin el Sacramento.
Como explican los padres de los pequeños, fueron los niños quienes se ofrecieron y organizaron todo, de lo que se sienten muy orgullosas sus familias por ese gesto de amistad y que agradecen enormemente los padres de Alejandro.
Fuente: Hoy