Sofía está casada con Luis y tienen tres hijos. Católica de ‘cultura’ empezó a acercarse a Dios cuando cambió a sus hijos a colegios del Opus Dei. Su vida era perfecta. Todo les sonreía.
Un día, Sofía, preguntó: «¿Cómo puedo prepararme para cuando Dios permita un sufrimiento en mi vida? «Rezando», le contestó una amiga.
Ahora afronta un cáncer muy agresivo y se ha encomendado a Pedro Ballester, un joven numerario del Opus Dei, que falleció hace unos años y que quería acercar a muchas almas a Dios.
La Asociación Lanza nos ofrece este magnífico testimonio