Se acerca la Jornada Mundial de Oración por las Vocaciones y las Vocaciones Nativas. Es el momento de que te plantees un servicio-para-siempre. No solemos hablar de forma tan directa pero, en lo que se refiere a las vocaciones, merece la pena. Te hablo de una negación de tu ser para que puedas servir a Dios y a los demás. ¿No esperabas una señal? Aquí está. ¡Toda tuya! Ha llegado el día de entregarte por entero, del todo, sin reservas. No hay otra opción. El Señor te ha llamado a ser santa o santo, sacerdote, profeta y rey. Todo eso en virtud de tu Bautismo. No tengo pruebas, pero tampoco dudas jajaja.
Al margen de la broma, hoy compartimos una vez más Tres Minutos Contigo, de la mano de Lidia López, una joven de 25 años que se dedica a ser Maestra de Primaria. Aún así, su servicio no queda allí, puesto que también se encuentra implicada en Pastoral Juvenil y Vocacional, en Effetá, en su parroquia y en muchos otros ambientes. Y afirma que siempre puede servir más. Ejemplos como este son respuesta a cada una de nuestras dudas, de nuestras inquietudes. Son guiños de Dios, que nos confirman una vez más la llamada al servicio.
¡Para servir, servir! No lo pienses más. Porque, como ha parafraseado muchas veces el Papa Francisco a Santa Teresa de Calcuta, «el que no vive para servir no sirve para vivir«. Todo esto es por lo que hoy te animamos a gritar con nosotros: «¡Que sirva!».