¿Cómo vivir la Cuaresma?

Cambiar el mundo, Cuaresma

Sin Autor

Fco. Javier Alba Martín
@javialba_

Durante la Cuaresma, Jesús nos invita a cambiar. En los tiempos que corren, no podemos evitar vernos tentados, sin tan siquiera darnos cuenta, por determinadas conductas, que nos alejan de Dios y del camino que Él nos tiene preparado.

Por ello, este período de 40 días es una invitación al cambio, una oportunidad de abrir los ojos y plantearnos ¿dónde estamos?, ¿cómo estamos viviendo nuestra vida?, ¿Es este el camino adecuado?

La Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, basándose en tres pilares fundamentales.

Oración

Este camino que vamos a emprender, no se podría entender sin la oración y es que no hay nada que nos acerque más a Él. La oración es la mayor fuente de energía para el cristiano.

Necesitamos dedicarle, el primer y último momento del día, pedirle que nos acompañe y que nos guíe en cada decisión que tomemos y que nos dé fuerzas no sólo para soportar con paciencia las tribulaciones cotidianas, sino para llevar con fe y confianza este camino hacia el cielo, no dejando nunca que nos separemos de Él. Dar gracias y hacer examen de conciencia cada noche, es la manera idónea de terminar el día. Por tanto, cosas tan básicas como dedicarle ese primer y último minuto del día, escuchar su Palabra, que es una palabra de vida, un aprender constante, el mejor medio que tenemos para comunicarnos con Jesús. Algo tan sencillo como, leer, reflexionar y preguntar, Jesús ¿qué tratas de decirme con esto? ¿qué quieres enseñarme con aquello?

También recomiendo y más durante este período, llevar a cabo prácticas que nos acerquen aún más a Él, como la misa diaria, la adoración semanal o también rezar el Santo Rosario de vez en cuando, que, aunque a veces nos da pereza, no debemos olvidar que es una escalera al cielo, y que también nos sirve para honrar a nuestra Madre. Personalmente, esta es una oración, que me llena de paz y sosiego cuando estoy en mis peores momentos. Cuando mi alma está alborotada, rezar el Rosario, invocar a María, que es Reina de la paz, me tranquiliza de inmediato. Rezar puede en ocasiones parecer complicado, pero la oración es una conversación personal con Dios, consiste en decirle lo que hay en tu corazón. ¡no hay más!!!!!

Ayuno

Ayunar, no se reduce a no comer carne durante los días de vigilia, muchos confundimos su verdadero significado. El fin último del ayuno es sacar de nuestra rutina aquello de lo que somos esclavos.

Yo personalmente he decidido ayunar del siguiente modo; puesto que soy bastante glotón, he decidido realizar únicamente 3 comidas al día, desayuno, comida y cena. Esto también es extrapolable a la bebida. A casi todos nos gusta irnos de copas con los amigos de vez en cuando. Pues podemos seguir yendo al mismo plan, pero sin beber o tomar solo una copa.

Otro enemigo silencioso del que somos víctimas, que nos ata, nos distrae y puede alejarnos de Dios son las redes sociales. Yo me he propuesto dedicarles el menor tiempo posible e invito a los que tengáis cierta adicción al móvil a hacer lo mismo.

Limosna y caridad

Dar limosna significa ser más generosos, abrir nuestro corazón a las necesidades de los demás. En mi opinión, dar limosna se trata de encontrar pequeñas formas de servir a las personas que nos rodean. Por tanto, debemos encontrar el equilibrio entre la ayuda económica y el servicio humano.

Para ello, debemos aprovechar este momento para acercarnos a los más necesitado de nuestra sociedad y también atender a quienes nos rodean: nuestros padres, abuelos, amigos. Algunas prácticas que podemos llevar a cabo, sería echar un cable a nuestro hermano con sus tareas si le vemos agobiado, visitar por sorpresa a nuestros abuelos, ser el chofer del grupo de amigos…

Durante estos 40 días vamos a hacer mini sacrificios que ofreceremos al Señor y puede que a veces se nos haga cuesta arriba y no entendamos que estamos haciendo, o incluso pensemos que son una cruz con la que debemos cargar. No podemos vernos tentados por estos pensamientos, debemos desterrarlos y evitar caer en la tentación.