EL FARO DE ALEJANDRIA
Una novela apasionante ambientada en la antigua Alejandría del Imperio Romano.
Caris es una chica de una familia noble de Éfeso, que secretamente sueña con convertirse en médico, algo verdaderamente impensable en la época a la que nos traslada esta novela. Por su origen y para obedecer a su padre, está obligada a casarse con un hombre sin escrúpulos, por lo que decide huir de su hogar hacia Alejandría convertida en eunuco, y deseando que, de esta forma, la dejen estudiar medicina. Nuestra protagonista se ve obligada a hacerse pasar por un eunuco libre a fin de que le dejen aprender y practicar medicina, pero tampoco la vida de un eunuco es fácil, por lo que son muchas las dificultades a las que Caris deberá hacer frente, sin darse nunca por vencida.
La novela está perfectamente ambientada en lo que actualmente conocemos como Turquía, y nos ayuda a recrearnos en la sociedad de la época, en la que la mujer tenía un papel realmente secundario, relegada a vivir bajo la protección de su marido, escogido por otros, durante toda su vida. Tampoco los eunucos gozaban de buena fama entre los romanos, ya que se les tenía por personas poco honestas, intrigantes y traicioneras, por lo que la protagonista no lo tenía fácil en absoluto. Igualmente, es curioso también ver el mundo de la medicina desde el prisma antiguo, los avances con los que contaban, como trataban las enfermedades…
En el plano religioso la novela ofrece cierto contraste ya que la protagonista, cristiana, tiene que vestirse de eunuco, pero a la vez mostrarse integra y valiente, sin olvidar nunca que debajo de su disfraz se esconde una mujer. Por otra parte, aparecen también el obispo de Alejandría, San Atanasio, que parece bien recreado en sus profundas convicciones, como también el maestro de Caris, judío, y su forma coherente de practicar la medicina.
Una novela recomendable, entretenida y muy amena.