Con este post queremos hacerte reflexionar acerca de quién eres… actuas «igual» con tu familia, profesores, amigos etc o eres una persona totalmente distinta con cada uno de los que te cruzas. ¿Eres de esos que tal vez solo manifiestan ser cristianos si el ambiente es el correcto o de los que si sus amigos/as son ateos o hablan de lo rollazo que es la misa/problemas de la iglesia, te callas como si no fuera contigo el tema?
Pues bien, te invitamos a que seas auténtico y te muestres tal y como Dios te ha hecho. ¿Tienes errores? Sí. ¿Te equivocas? Sí. ¿Fallas a los demás? Sí. Pero es como te ha hecho Dios, piensa que tu personalidad no es el resultado de tus relaciones con amigos e interacción con este mundo… sino un fruto del pensamiento de Dios. Así que ese hermoso fruto ¡que eres tú! no lo tires por la borda.
El ser tal y como realmente eres, te hará libre, y no hay nada más bello que vivir totalmente libre. Sin tener que preocuparse de si las gafas son rayban, si el jersey lleva una banderita, un caballo, si la sudadera es ganso o silbon… o si los tacones que llevo son de plataforma, en instagram salgo guapa y llevo mil accesorios de bimba&lola etc
Todo eso no importa nada, es del mundo y cuando te mueras nadie recordará como era la ropa que llevabas etc Vivamos con los pies en la tierra y la cabeza en el cielo. Seamos en la tierra quién Dios quiere que seamos y no como los demás quieren vernos.
No tengas miedo de ser tú, porque si dejas de ser esa persona que Dios pensó y ama, tal vez no puedas cambiar el mundo.